jueves, 31 de diciembre de 2015

Azerbaiyán

Tras haber estudiado económicamente (años 1990-2014) el grupo de países de las repúblicas exsoviéticas bálticas y europeas mediante el informe económico, ahora vamos a estudiar más a fondo uno de estos países. A pesar del interés que pueda tener una de las repúblicas exsoviéticas bálticas como es Estonia debido a su economía actual, tras la disolución de la URSS, Azerbaiyán ha ido ganando importancia en cuestión económica, por tanto, va a ser el país a estudiar.

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Este pequeño país situado en la región del Cáucaso, entre Asia Occidental y Europa Oriental, tiene por fronteras al oeste Turquía y Armenia, al este el mar Caspio, al sur Irán y al norte Georgia y Rusia.


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A nivel político-social, Azerbaiyán ha cambiado mucho de hace unos doscientos años hasta hoy día. A principios del siglo XX, este país era un conjunto de kanatos que se habían unidos para anexionarse al Imperio Ruso tras la firma del Tratado de Gulistán. Es decir, lo que hoy conocemos como Azerbaiyán pertenecía al gran Imperio Ruso.
Con la llegada de la Primera Guerra Mundial, el Imperio Ruso cayó, y como consecuencia, Azerbaiyán, junto con Armenia y Georgia, pasó a formar parte de la República Democrática Federal de Transcaucasia. Esta república duró poco tiempo, ya que en mayo de 1918 se produjo su disolución. Tras esta disolución, Azerbaiyán se declaró independiente como la República Democrática de Azerbaiyán. Este estado, con la independencia, formó el primer parlamento en el Oriente musulmán. Además, en el año 1919, se convirtió en la primera república democrática en el mundo islámico en reconocer el derecho de voto a las mujeres.


Esta república duró alrededor de dos años, ya que en 1920 fue invadida por el Ejército Rojo Bolchevique, y se pasó a establecerse la República Socialista Soviética de Azerbaiyán. Posteriormente, Azerbaiyán se convirtió en nuevo miembro de la Unión Soviética.

Bandera de la República Socialista Soviética de Azerbaiyán
Durante la Segunda Guerra Mundial, este país colaboró suministrando gran cantidad de petróleo en el Frente Oriental; además la mayor parte de su población luchó contra la Alemania nazi.



La enemistad con los vecinos armenios llevó al inicio del conflicto de Nagorno-Karabaj. Este conflicto provocó unos enfrentamientos en los últimos años de la URSS, que terminó con la independencia de Azerbaiyán el 30 de agosto de 1991, tras la disolución de la Unión Soviética.

La independencia trajo consigo mucho progreso en cuestión económica para este país. A partir de 1991, Azerbaiyán se ha convertido en miembro del Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial o del Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo entre otras instituciones. En 1992 se creó el Banco Central de Azerbaiyán, cuya función principal es la emisión y el impulso del manat azerbaiyano (moneda).

En la actualidad, la economía de Azerbaiyán es una de las economías de más rápido desarrollo del mundo. La gestión económica con el actual presidente de la república Ilham Aliyev ha sido magnífica, ya que ha conducido al país a un crecimiento económico que se puede observar con la subida explosiva de su PIB en los últimos años.
Crecimiento del PIB de Azerbaiyán en términos absolutos
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A pesar de que la economía azerbaiyana se basa principalmente en el petróleo y en la agricultura, en los últimos años, este país ha planteado un crecimiento económico al margen de las reservas de petróleo, ya que son conscientes de que terminarán por acabarse.
La idea es crecer de forma que conlleve a la implicación de inversores extranjeros, y expandir la economía y publicitarla a todo el mundo. Este crecimiento que no tiene en cuenta el petróleo, lo hemos visto en los últimos años mediante publicidad en la camiseta de fútbol del Atlético de Madrid, la presencia en el festival de Eurovisión o la candidatura a los juegos olímpicos de Bakú 2020.


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domingo, 20 de diciembre de 2015

La Historia siempre la han escrito los vencedores.

Foto Original: Aquí.

La historia siempre la han escrito los vencedores. No hay que darle demasiadas vueltas al argumento: el que sobrevive cuenta su versión y perdura. Lejos de la visión romántica que nos pueda arrojar la terrible épica de la Segunda Guerra Mundial,  manifestada  en la lucha del bien contra el mal; de la libertad contra el totalitarismo o simplemente la de buenos contra malos, se esconde el enfrentamiento de la ambición expansionista económica de dos partes del mundo, o de dos formas de entender dicho crecimiento. 

Situémonos en un punto intermedio de este conflicto:  por ejemplo, el ataque a Pearl Harbor   (base naval norteamericana en Hawai), el 7 de diciembre de 1941, por parte de las fuerzas imperiales de Japón. ¿Fue el día de la infamia como diría el trigésimo segundo presidente de los Estados Unidos de América,  Franklin D. Roosevelt?, tal y como recoge el Archivo Nacional norteamericano.



Todo apunta a que Roosevelt se refería a que el ataque se produjo sin una declaración previa de guerra. Algo que Japón niega y que en cualquier caso es una mera anécdota si se analiza la magnitud de un conflicto que acabó con el lanzamiento de dos bombas atómicas: Hiroshima y Nagasaki, los días 6 y 9  de agosto de 1945, respectivamente.
Foto Original: Aquí.

En líneas generales, nos encontramos en 1941 con medio mundo en guerra. Estados Unidos se mantenía en una aparente neutralidad en un mundo expansionista. Apoyaba con suministros a Inglaterra, vendía armas a Rusia e intentaba frenar el despliegue de Japón por su zona de influencia, donde los nipones buscaban  materias primas en las antiguas colonias europeas e incluso invadían parte de China.

 Actos que siempre fueron contestados desde Washington con medidas diplomáticas, amenazas armadas y embargos económicos que trastocaban los planes de un imperio que acabaría aliándose con Alemania e Italia para repartirse todo el pastel posible.


Tendríamos que remontarnos con profundidad a las consecuencias de la Primera Guerra Mundial y la fiebre de modernización e industrialización que sufrió Japón para entender con exactitud el porqué de Pearl Harbor.
¿Pero qué esperaba el Imperio de Japón, ya alineado formalmente con Alemania e Italia, de un ataque de este tipo? ¿Era un ataque preventivo para reforzar las corrientes no beligerantes que imperaban en Estados Unidos en aquellos momentos?

 Hay que recordar que el país seguía padeciendo las consecuencias de la crisis del 29, con un notable paro y que la segregación racial (negros y etnias autótonas) era institucional. ¿Era Estados Unidos realmente el baluarte de la democracia y el  alter ego de la Alemania Nazi? Discutible, cuanto menos, sobre todo porque tanto el presidente Roosevelt, como el secretario de Estado Hull, se opusieron a una resolución del Congreso pidiendo al gobierno alemán la restauración de los derechos de los judíos, en 1934.

Foto Original Aquí.
Lejos de los paralelismos, hay evidencias que son palpables y que desde el punto de vista económico decantaban, al menos sobre el papel, la victoria del lado norteamericano sin que hubiese caído una sola bomba en Hawai: en 1941 el PIB de Japón era la quinta parte del estadounidense. Aunque en la cuenta global las diferencias se disipaban al cincuenta por ciento, si se sumaban los de sus aliados. La previsión nipona se basaba en una guerra corta y que los estadounidenses redoblarían sus esfuerzos para  conseguir que Inglaterra no sucumbiera ante el empuje alemán, lo que dejaría a Estados Unidos cercado prácticamente, con Japón a su espalda y la Europa Nazi cortándole la conexión con el Viejo Continente. Gran error de cálculo.


Perl Harbor sólo era el inicio de una ofensiva destinada a desalojar a todas las fuerzas británicas y estadounidenses del pacífico Sur: Filipinas, Tailandia, Birmani, Hon Kong, las islas de Wake y de Guan, las Indias Orientales Holandesas. Un ambicioso plan en el que ni si quiera Yamamoto (almirante y comandante jefe de la Flota Combinada de la Armada Imperial Japonesa durante al Segunda Guerra Mundial) creía a ciencia cierta: 

"Durante los primeros seis o doce meses de guerra contra los Estados Unidos y Gran Bretaña, causaré estragos en todos sus flancos y conquistaré una victoria tras otra" pronosticó. "Después... no tengo esperanzas de ganar"

Estas palabras de Yamamoto son extraidas de la obra de Beevor Antony; La Segunda Guerra Mundial (The Second World War) 2014. 


Foto Original: Aquí.
A Yamamoto se le atribuye la frase “hemos despertado al gigante”, pero en ningún caso parece verídica. Lo que sí es constatable es que Estados Unidos asumió su rol expansionista y puso toda su maquinaria en marcha para conservar su ámbito de influencia en el Pacífico y, de paso, en el resto del mundo, resolviendo, de golpe, un buen número de problemas de su economía interna.
Los norteamericanos, se impregnaron de un sentimiento patriótico que se transformó en un crecimiento exponencial de su economía: en 1943, dos terceras partes del presupuesto federal estaba destinado a la industria de guerra. Estados Unidos pasó de un presupuesto de 9.4 billones en 1939 a uno de 95.2 billones en 1945.



El desarrollo industrial conseguido por Estado Unidos durante este periodo propició, en buena medida, su hegemonía hasta nuestros días, puesto que se convirtió en el gran proveedor de lo que durante buena parte del siglo XX se conoció como el mundo Occidental, enfrentado a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas y sus satélites. Dos mundos, en  definitiva, como los que se confrontaron en la Segunda Guerra Mundial.

lunes, 23 de noviembre de 2015

Pakistán.

Una vez realizado un informe económico,  a gran escala, que abarcaba desde 1990 hasta el 2015 de los países de Asia Central, me planteo en la tesitura de escoger sobre qué país quiero escribir, en cual quiero sumergirme, de cual quiero conocer las raíces y hacerlo en parte mío.
Foto Original: Aquí
Entre estos países encontrábamos algunos muy interesantes, desde el punto de vista económico,  como Bangladesh o Mongolia y otros como Kazajstán y Afganistán. Sin embargo, he escogido Pakistán por  el motivo de su creación.

Foto Original: Aquí
Para hablar del pasado de Pakistán debemos hablar, paralelamente de la India. Como vemos en el anterior mapa, Pakistán se encuentra al noroeste de la India. Sin embargo, si observamos un mapa de 1858 la imagen de la India será un poco diferente. En ese año la India comenzó a ser colonia británica, lo que se conoce hoy día como la India Británica.

En el año 1858  la India Británica, era la colonia de Gran Bretaña que les permitió tener una ruta comercial hasta Asia. No fue hasta finales del siglo XIX cuando la India comenzó a dar sus primeros pasos hacia la independencia gracias a personas como Mahatma Gandhi, pensador y líder del nacionalismo Indio.  Con Gandhi y su lucha por la independencia nos situamos después de la Primera Guerra Mundial hasta el año 1947.

El 15 de Agosto de ese mismo año nacen legalmente dos Estados, Pakistán y La India. La India es liberada por Gran Bretaña  y es dividida en dos, una división que ya habían comenzado los Ingleses, los musulmanes  eran una minoría entre los hindúes y a su vez éstos se sentían desplazados y discriminados ante el gobierno al que veían favoritismo hacia la minoría musulmana. Es en este contexto en el que se da la partición de la India y el nacimiento del país objeto de nuestro estudio, Pakistán.

Foto Original: Aquí.
Según la edición de la revista National Geographic de septiembre de 2007 (en la que estoy apoyándome para conocer un poco más la corta historia de este país y entender qué está ocurriendo realmente en él) "en un principio, los fundadores de Pakistán pretendían que su nación fuera un refugio para los musulmanes, no un estado islámico" a día de hoy la realidad dista mucho del planteamiento democrático inicial. 

Desde la muerte en 1948 de Mohammed Ali Jinnah, el primer jefe de Estado de Pakistán, y posteriormente, el asesinato del primer ministro Liaqat Ali Khan, Pakistán ha estado bailando entre conflictos internos religiosos en los que ha intervenido la India y han derivado en guerras. 

Islamabad, foto original aquí.
Pakistán a día de hoy es un país con 796095 kilómetros cuadrados  con salida al mar al sur, se organiza en forma de República Parlamentaria cuyos dirigentes son actualmente Mamnoon Hussain y Nawaz Sharif. Algunos datos demográficos son su número de habitantes 182 565 3020, o su densidad, 229,33 habitantes por kilómetro cuadrado. Su capital es Islamabad. Sin embargo su ciudad más poblada es Karachi, a día de hoy foco de conflictos. El idioma oficial de este país es el Urdu y el Ingles.


Si hacemos referencia a las relaciones comerciales, en 1976 se firmó el Acuedo de Cooperación Comercial UE-Pakistán pero fue sustituido por el Acuerdo de Cooperación Comercial, Económica y de Desarrollo.  En 2004 este Acuerdo se amplia a cuestiones como el medio ambiente, ciencia y tecnología, las drogas y el blanqueo de dinero. Hay un programa con la finalidad de apoyar a Pakistán de forma financiera, el documento se llama Estrategia 2007-2013. Además Pakistán forma parte de la Organización Mundial del Comercio (OMC) desde le 1 de Enero del 1995 y miembro del GATT desde el 30 de Julio de 1948.

Eso en cuanto a relaciones con la Unión Europea y el resto del mundo, en cuanto a sus vecinos, Pakistán es miembro del SAARC (South Asian Association for Regional Cooperation) desde el 6 de Enero de 2004 cuando se firmó el acuerdo en su capital Islamabad. El SAARC tiene muchos ámbitos de cooperación común entre sus países miembros como puede ser la biotecnología, el alivio de la pobreza, la educación, el turismo y el desarrollo social entre otros.

Pakistán, desde su creación hasta el día de hoy, ha pasado por varias guerras, las más relevante es la guerra que incluso a día de hoy persiste entre los radicales musulmanes y los moderados, los primeros defienden y claman por un Pakistán islámico, los musulmanes moderados pretenden la creación o la existencia de un estado libre, laico y que pueda desarrollarse sin lastres de ningún tipo, ni siquiera religiosos.

Además contamos con las guerras que se han sucedido desde la independencia de ambos entre la India y Pakistán, Ambos países se han enfrentado en tres guerras, dos de ellas por Cachemira, región en la frontera de la India con Pakistán que los pakistaníes reclaman como suya debido a la gran mayoría de musulmanes que hay en la ciudad y sin embargo, India, no quiere cederles.

La carrera en el rearme nuclear entre estos dos países es tangible si rebuscamos en las hemerotecas el año 1998 en el que ambos países se dedicaron a realizar ensayos con armamentos nucleares, a partir de ahí las tensiones no han desaparecido entre ambos pero no se ha vuelto a usar armas nucleares, los tiroteos son frecuentes entre ambos países y en el horizonte no se vislumbra ningún paso atrás de ninguno de los dos.

A pesar de la Historia que tiene detrás, la información que nos llega de esta región del mundo siguen siendo catástrofes, miseria, guerra, muerte. A día de hoy el Estado Pakistaní tiene que hacer una inversión mucho mayor en gasto militar que en gasto en educación (como podemos comprobar en los datos del Banco Mundial) esto ocurre porque el ejercito radical islamista se dedica a destruir todo intento de avance que encontramos en el país.

Los blancos más fáciles y más indicados son las escuelas del estado, escuelas que pretenden llevar a cabo una modernización del país a través de un cambio en la mentalidad de las futuras generaciones, una separación de Estado y Religión, respetuosa y cordial pero no dependiente.

Pakistán es un país que tiene demasiados frentes abiertos y que, a mi parecer, no tiene claro quienes son sus aliados y quienes sus enemigos. Es una país muy nuevo en el panorama mundial pero muy antiguo en cuanto a creencias y tradiciones islámicas, estas tradiciones afectan a su vez a la economía. Por ejemplo, los musulmanes practicantes no comen cerdo ni beben alcohol, por lo cual este país queda fuera del mercado que mueve mucho dinero en otros países como es el alcohol.

Para terminar me gustaría comentar otra lacra de este país, no reciben ingresos algunos por el turismo, en el caso de recibirlos, son muy inferiores a los que deberían ser.
En Pakistán hay parajes idílicos que sin embargo no son visitados por el miedo a la situación política del país, ¿Qué pasaría si debajo del Big Ben hubiera soldados y cadáveres apilados, edificios derruidos en Francia o hambre y miseria en Nueva York?

Quizás no somos conscientes de las maravillas que hay en estados en guerra y de cómo estamos quedándonos sin ellas, el patrimonio artístico y natural de la humanidad está en peligro de extinción en situaciones como las de este país y eso es algo que desde los despachos de los altos cargos de las potencias europeas y mundiales debe ser tenido en cuenta. 


Multán. Foto original aquí. 



martes, 3 de noviembre de 2015

La Guerra de Cuba y el Desastre del 98.

La isla de Cuba, junto con Puerto Rico y Filipinas, eran las últimas colonias que poseía el Imperio español en Ultramar, debido a que a principios de siglo XIX se había desarrollado un proceso de emancipación que había culminado con la pérdida de la mayoría del Imperio. Cuba concentraba los mayores intereses económicos en torno a la producción de azúcar, cacao y otros cultivos tropicales. El negocio cubano estaba compartido por peninsulares y por una burguesía criolla próspera y culta que veía a España como un estorbo para la soberanía del país y para sus intereses particulares. Puerto Rico presentaba una economía basada en la agricultura de exportación; mientras que en Filipinas, a pesar de que la población española era escasa y los capitales invertidos no eran relevantes, la fuerza militar y algunas órdenes religiosas la unían con España.

Bandera de Cuba

La crisis del 98, la cual estalló coincidiendo con la regencia de María Cristina de Habsburgo en España, estuvo motivada por la pérdida de estas últimas colonias. Supuso el comienzo de la crisis del sistema de la Restauración (iniciado en 1874). El desastre del 98 fue un golpe que hizo resquebrajar las bases del sistema y planteó la necesidad de tomar medidas orientadas a la regeneración de la vida política y social del país.

Esta crisis se inserta dentro del contexto internacional de finales del siglo XIX. Las principales potencias económicas estaban protagonizando la carrera colonial que les llevó a la formación de inmensos imperios en África y Asia. EEUU desarrolló también una política imperialista, dirigida hacia el continente americano y el Pacífico. La doctrina Monroe estaba dirigida a las potencias europeas y manifestaba que los Estados Unidos no tolerarían ninguna interferencia o intromisión de éstas en América. La intervención de los norteamericanos en la independencia de estos territorios se explica por la intención de hacerse con el control de Cuba y Puerto Rico.

Mapa de los grandes imperios coloniales del siglo XIX
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La guerra por la independencia de Cuba había tenido una serie de precedentes. En cuestión económica, España imponía una política fuertemente proteccionista sobre el comercio cubano, alentada por los propietarios de plantaciones y comerciantes peninsulares, que no querían ver peligrar sus ingresos. Además, la incapacidad económica española para absorber plenamente la producción de productos cubanos, hizo que esta producción se dirigiera a EEUU. Por otra parte, España era incapaz de abastecer de manufacturas a la isla debido a su atraso económico,  por lo que Estados Unidos acabó suministrando estos recursos.

En 1891, el gobierno español sube los impuestos de los productos importados a la isla que no procediesen de la Península (arancel Cánovas). Eso dificultaba el comercio de productos estadounidenses en Cuba. El presidente norteamericano William McKinley manifestó su protesta y amenazó con cerrar las puertas del mercado estadounidense al tabaco y el azúcar cubanos si España no modificaba su política arancelaria. Este hecho fue el precedente económico principal de la crisis del 98.

Caricatura que representa la situación de la época

A raíz del desastre del 98, no se produjo una fuerte crisis económica en España, a pesar de la pérdida de los mercados coloniales y de la deuda causada por la guerra.

La consecuencia a corto plazo de la guerra de Cuba fue que la desaparición de los mercados coloniales perjudicó a las exportaciones y encareció los bienes importados de las antiguas colonias. Pese a ello, las estadísticas de la época nos muestran que en los primeros años del nuevo siglo se produjo una inflación baja, una reducción de la Deuda pública y una considerable inversión proveniente de los capitales repatriados que estimularon la creación de nuevos bancos y empresas. A medio y largo plazo, la crisis fue favorable para la economía española, ya que obligó a una renovación de la estructura productiva. 






miércoles, 14 de octubre de 2015

La Semana que marcó 1909.

Nos situamos en una casa obrera española a principios del siglo XX. España acaba de pasar por el Desastre del 98, la pérdida de las últimas colonias españolas que abre los ojos de los españoles y les provoca una crisis de identidad nacional. Esto lo vemos reflejado en la poesía con autores como Machado que escribe Campos de Castilla; en la narrativa con Pío Baroja y el Árbol de la Ciencia o  en el teatro con libros como Luces de Bohemia, de Ramón María del Valle-Inclán. (La generación del 98).

La economía sufrirá tras la perdida de las colonias, España perderá una posición privilegiada en el comercio de productos propios de América, como eran el tabaco o el cacao, y  tendrá que empezar a adquirir dichos productos en el mercado internacional donde los pagará mas caros.

Sin embargo, en la economía, se puede decir que no todo fueron malas noticias. Los gobiernos de la restauración llevaron a cabo un saneamiento de las finanzas públicas, es decir, fortalecieron los ingresos públicos con el objetivo de reducir el Déficit público. Además el Banco de España controlaba la emisión de billetes para evitar la inflación y así estabilizar la peseta.


Si dejamos la macroeconomía para pasar a la microeconomía encontraríamos interesante enfocar Barcelona en la primera década del siglo XX para conocer por qué se dio la crisis de 1909, también conocida como la Semana Trágica, y qué repercusiones provocó en la sociedad de la época y en la ciudad.


Foto Original.
Podemos imaginar una familia humilde, sin acceso a la educación o a estudios superiores, cuyos hijos heredan el trabajo de sus padres. Una familia como la de la foto viviendo en una Barcelona en expansión, que por aquella época concentraba la mayor parte de la industria de la época, donde las desigualdades sociales y económicas eran bastante importantes, lo cual desembocaba en protestas y movilizaciones obreras. Todo esto dio paso a la creación en 1907 de la Solidaridad Obrera.

Foto original: Aquí.


Para poder tomar conclusiones debemos empezar hablando de la causa o causas de esta "Semana Trágica". Por aquel entonces, España seguía arrastrando el tema del Desastre del 98, pero además se encontraba inmersa en otro frente, Marruecos. España pretendía suplir la pérdida de los territorios Americanos con los de África y gracias a la Conferencia de Algeciras lo consigue repartiéndose África con otras potencias europeas en lo que se conoce como el "banquete colonial".

Tras la conferencia de Algeciras se procede a la ocupacion del territorio marroquí con salida al mar, sin embargo, el hecho de que Francia hubiera fimado el acuerdo no protegía a España de las tribus africanas, las cuales reclamaban lo que siempre había sido suyo. Tras el Desastre del Barranco del Lobo  se intentaron movilizar tropas de reservistas en toda España para su posterior traslado a África. Esto fue el detonante de la Semana Trágica en Barcelona.

Volviendo a la familia, imaginen la cara de esa mujer cuando llega la orden de enviar al frente a su marido, padre de 4 o 5 hijos, cuyo sueldo es el que sostiene a la familia. Además sabiendo que no tendrán otra opción, no podrán negarse a que el progenitor vaya al frente, puesto que no tienen el dinero necesario ahorrado para evitar el servicio militar como harán los burgueses de la España de la época. Esta es la verdadera razón que hará que desde el 25 de julio hasta el 1 de agosto se produzca esta protesta, el sentimiento de desigualdad respecto a otras clases de la sociedad de la época.

Este sentimiento de impotencia será aprovechado por los movimientos socialistas y anarquistas para desencadenar todos los disturbios posteriores. Las autoridades no pudieron contener la agitación de la sociedad y declararon el estado de guerra. Los blancos fáciles fueron los cuarteles de la guardia civil así como las iglesias o vías de tren. Debido a esto último, Barcelona quedo incomunicada para los dos bandos.

Podemos suponer cómo quedaría la ciudad y la repercusion economica que tuvo que tener, por ejemplo, la ausencia de un medio de transporte en el que llevar mercancías o víveres cortando las rutas comerciales con el resto de España así como con el exterior. Posiblemente la destrucción de Iglesias y edificios públicos hiciera que tras esta semana se diera un aumento de oferta para los trabajadores de la construcción. 

Sin embargo podemos atrevernos a predecir que la tensión entre proletarios y burgueses no finalizara con esa semana, se extenderá alterando el comportamiento de ambas clases sociales. Cambiaran los gustos por el tipo de entretenimiento u ocio de los burgueses o quizás se sientan inseguros en la calle en época de cambios. Estos son mínimos ejemplos de como un acontecimiento, aparentemente político tiene repercusiones en la economía de un país y puede llegar a alcanzar niveles mundiales

Durante esta semana se producirán terribles sucesos que dejarán un importante número de heridos y muertos. Fueron juzgadas más de 400 personas aunque solo fueron ejecutados 5 de los 17 condenados a muerte. Entre ellos Francisco Ferrer y Guardia.

Las consecuencias de esta semana no han sido todas, como se puede esperar, negativas. Si indagamos en busca de datos en 1910 y años posteriores descubrimos que subieron tanto la tasa de alfabetización como la esperanza de vida al nacer, lo que nos permite creer que hubo una mínima mejora en las condiciones de vida, al menos, de los más jóvenes de nuestro país.

Por último, cabe destacar que como consecuencia de este periodo, se crearon partidos obreros como la CNT e incrementaron el número de afiliados los ya existentes. Estos partidos pretendían conseguir la emancipación económica de la clase obrera y acabar con la riqueza social que poseía la burguesía.
Este periodo supone un gran paso para la sociedad española ya que se deja atrás a la burguesía y empieza a aparecer la clase trabajadora que mediante manifestaciones y reivindicaciones se va haciendo hueco en la sociedad cambiando el rumbo de la economía hacía los modelos que tenemos hoy en día.